3 tipos de radiación UV (peligrosa y no peligrosa)
Hay tres tipos de radiación UV:
- Los rayos UV-A están asociados fundamentalmente al envejecimiento de la piel.
- Los rayos UV-B son los más dañinos para los ojos y la piel.
- Los rayos UV-C no llegan a la Tierra porque los absorbe la capa de ozono (y, por lo tanto, no son peligrosos).
Los efectos de la radiación UV en la piel
Los rayos UV pueden dañar la piel de varias maneras. A continuación te presentamos algunas de ellas:
- Daños en el ADN
La radiación ultravioleta puede dañar el código genético de las células cutáneas. Esto puede causar cambios en el ADN, lo que puede provocar un crecimiento celular descontrolado [1].
- Estrés oxidativo
¿Conoces el término estrés oxidativo? Este término se utiliza cuando existe un desequilibrio entre la producción de radicales libres y los antioxidantes protectores del organismo. Los radicales libres son moléculas inestables que pueden causar daños. Los antioxidantes pueden protegerte contra esos daños. Puedes encontrarlos en los alimentos (vitaminas C y E, selenio). La radiación UV puede aumentar el estrés oxidativo, lo que puede provocar inflamación y daño a las células cutáneas [2]. Es una de las principales causas del envejecimiento prematuro de la piel.
- Cambios en el sistema inmunológico
Los rayos UV pueden debilitar el sistema inmunológico de la piel. Esto hace que sea más difícil para la piel reparar y renovar las células dañadas [3].
- Cambios en el colágeno
La radiación UV puede reducir la producción de colágeno [4]. El colágeno es una proteína que fortalece la piel. Una menor producción puede provocar arrugas y flacidez en la piel.
Cómo protegerse de los rayos UV
Protégete usando ropa protectora (como un sombrero). Evita la exposición al sol durante las horas del día con mayor radiación ultravioleta. El RIVM (Instituto Nacional holandés de Salud Pública y Medio Ambiente) recomienda evitar el sol de 12:00 a 15:00.
También puedes proteger tu piel desde dentro con ciertos nutrientes. Así, tu piel es capaz de protegerse de manera óptima contra posibles daños al ADN y el colágeno, así como del daño oxidativo. A continuación, puedes leer qué nutrientes contribuyen significativamente a proteger tu piel.
Resumen: El sol puede causar daños en la piel y envejecimiento cutáneo. Protégete del sol con ropa que te cubra el cuerpo. No te expongas al sol durante la parte más calurosa del día. Toma nutrientes que protejan tu piel desde dentro.
¿Qué nutrientes protegen tu piel desde dentro?
Los estudios muestran que una ingesta combinada de vitamina E, vitamina C, selenio, carotenoides y proantocianinas protege activamente tu piel contra la radiación UV, por lo que se quema menos rápidamente con el sol [5]. ¿No son buenas noticias? Te contamos qué significan para tu piel esas sustancias específicas y los alimentos en los que se encuentran:
Vitamina E
La vitamina E es un
antioxidante capaz de reducir el estrés oxidativo en la piel. Hay varias formas de obtener vitamina E en la piel, incluyendo el uso de productos para el cuidado de la piel que contengan vitamina E. La forma más sostenible de obtener vitamina E es comer alimentos que contengan esta sustancia. Los alimentos ricos en vitamina E incluyen
las almendras, el aguacate, las espinacas y las pipas de girasol.
Selenio
El selenio es un antioxidante que protege la piel del estrés oxidativo y del daño celular. También contribuye al mantenimiento de la elasticidad de la piel y a prevenir el envejecimiento prematuro. El selenio se encuentra principalmente en el pescado y las nueces de Brasil. Vitamina C
La vitamina C es un antioxidante que protege la piel del daño de los radicales libres y contribuye a la producción de colágeno. La vitamina C se puede encontrar en frutas y verduras. Carotenoides
Los carotenoides son pigmentos naturales que se encuentran en muchos alimentos. Algunos carotenoides comunes que son beneficiosos para la piel son el betacaroteno, la luteína, la zeaxantina, el licopeno y la astaxantina.
Los carotenoides también puede convertirse en vitamina A en el cuerpo y pueden mejorar la salud de la piel. Eso se debe a que actúan como antioxidantes que protegen las células cutáneas del daño de los radicales libres causado por los rayos UV.
Los carotenoides se encuentran en muchas frutas y verduras, como las zanahorias, los pimientos, las espinacas y los tomates. El carotenoide astaxantina se encuentra en los camarones, las langostas, los cangrejos y el salmón. La astaxantina le da a estos alimentos su color rosado.
Flavonoides
El término flavonoides (o también bioflavonoides) se refiere a un extenso grupo de sustancias vegetales que, como pigmentos, contribuyen en gran medida a los colores brillantes de muchas frutas y verduras. Los flavonoides son antioxidantes particularmente fuertes para la piel y también pueden inhibir la inflamación cutánea.
En general, los componentes más coloridos de los alimentos, como la piel de la fruta, contienen el mayor porcentaje de flavonoides. Un flavonoide particularmente saludable para la piel es la proantocianina. Se encuentra principalmente en las manzanas.
Resumen: Una combinación de vitamina E, vitamina C, selenio, carotenoides y proantocianinas protege la piel de los rayos UV.